6 de septiembre de 2007

Reforma



Reforma es, después de Insurgentes, la cosa más rara del mundo. Ayer llegué en 30 min. a mi trabajo, hoy hice una hora. Cada día llego de malas a la oficina, después de ver las cosas más extraordinarias del planeta. Soy pobre, así que viajo en micro, TRP, camión o lo que se deje. Tengo que perseguirlos para que me dejen subir, cambían de parada cada semana así que nunca sé en qu esquina pararme para poder tomarlo. Y una vez arriba (después de perseguir a tres y que uno me dejara subir) es peor.


Hay quien se queda parado junto a la puerta delantera, habiendo espacio suficiente en el pasillo, no les improta, así que una manada de humanos nos acomodamos como podemos en las escaleras, uno que otro volando por la puerta. He discutido ya varias veces con personas inconscientes que me ven feo sólo por pedirles que se recorran o me dejen pasar. He recibido codazos e insultos, de vez en cuando alguna mirada de indiferencia.




Pero lo que más me enoja es que los hombres ya no son nada caballerosos ni educados. Digo, yo entiendo que no se van a parar y me van a ceder su asiento (hay quien si lo ha hecho y lo agradezco, sobre todo aquellos días en que uso tacones, que son los menos, la verdad) pero de eso que la empujen a una para ganar el lugar o se hagan los dormidos para no dejar sentar a una mujer que va a cargando a un niño, la mochila del segundo y una bolsa, no se vale. Y todo porque se escudan diciendo ¿querían igualdad no?.




Pero esa igualdad es una mentira mentirosa de lo peor. Trabajo en un medio en el que el 90% de los empleados somos mujeres. Mi jefa es la segunda al mando, pero ella es la que hace toda la chamba, mientras el jefe-jefe no hace nada.




Y digo, fuera de la cuestión de las oportunidades laborales (repito que el 90% somos mujeres en esta oficina, el otro día los conté y sólo trabajan 8 hombres) está la cuestión de la doble labor. Gracias a Dios la mayoría somos solteras, pero ¡ay de aquellas que tienen niños! Sufren, y sufren mucho.




Por ponerles un ejemplo, hay días en que nuestra jornada laboral se ha extendido hasta la 1 de la madrugada, alguno que otro sábado, y la semana pasada hubo quien vino en domingo. Pues bien, esos días los celulares de las empleadas-esposas-mamás no deja de sonar. Si no es el esposo para avisar que el ambién va a salir tarde, es la mamá para preguntarles si pueden pasar por sus hijos porque tienen que ir al doctor, o los mismos niños que les llamán para decirles que tienen que llevar un cuarto de papel ilustración, diez latas de atún vacias pintadas de negro o dos mechudos de rafia roja (esas cosas rarísismas que a las maestras se les ocurre pedir en miércoles), o simplemente porque les duele la cabeza, se les cayó el diente o las extrañan....




Que dificil es trabajar y ser mamá, cuando ser mamá es una responsabilidad tan grande, cuando los dos papás trabajan, cuando llegas a tu casa a las 9 de la noche a cenar y revisar tareas. Cuando sabes que si te embarazas probablemente te dirán adiós poco después de que regreses de tu licencia de maternidad.




Es por eso que yo tengo el firme propósito de no ser madre a menos que pueda vivir sin trabajar al menos un tiempo... y como soy pobre y eso no es posible, pues no tendré hijos. La verdad es complicado pensar en la maternidad con todos los problemas del mundo. Me niego a tener hijos sólo para sentirme realizada como mujer (no se como sea la onomatopeya de una trompetilla pero eso es lo que pienso al respecto).




Además, imaginenme embarazada y subiendo al camión en Reforma...




Pero a pesar de tod Reforma es bonito (bienvenida al tema).




4 comentarios:

  1. Siento que ya no es tanto Reforma ni Insurgentes ya es toda la Ciudad de Mèxico, yo al negocio a veces hago 10 minutos y otros dias puede pasar mas de una hora.
    Hace como 3 años tuve una mala experiencia en un micro, iba con muletas y cuando subi el microbusero arrancò como si fuera a recibir herencia ya te imaginaras a donde fui a parar, al suelo jajaajaj, me ayudo a levantar mi amiga que me acompañaba al centro, pero lo que mas coraje me dio fue ver que la gente viendome como estaba prefirieron seguir leyendo el periodico que no creo que lo estuviran leyendo, otros disque escuchando musica, otros tantos como dices tu haciendose los dormidos, para no hacertela larga prefirio pararse un señor como de 80 años para darme su lugar, en ese momento le di las gracias y le dije que no se preocupara que mejor si me podia hacer favor de detener las muletas hasta ese grado llega la gente.
    En que trabajas; bueno si se puede saber :)
    Y si coincido contigo Reforma es bello, ùnico.
    Saludos y esperemos que mañana sea un mejor dia.

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  2. Tienes razón, es toda la ciudad de México, pero a veces no es tanto la ciudad sino la gente, imagínate que, para variar, en Reforma, en la base de micros del auditorio, uno se me aventó...para avanzar 10 centimetros...jejeje,ya ni llorar es bueno. Y sí yo también espero que sea un mejor día.

    Por cierto, trabajo en una agencia de medios.

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  3. La cada vez más inhabitable ciudad de México.
    ¿Qué decir de ella?
    Quizá solo que es un mal necesario y que aún con todo esto que describes y todo lo que no, me gusta y siempre me gusta regresar, la extraño cuando no estoy aquí.
    Pero igual, los "peseros" o más bien, sus conductores; son insoportables.

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  4. Sí, yo también quiero a la ciudad de México. 1 hr 30 mn al trabajo el día de hoy.... Todo un record!!!

    Intentaré ser positiva, dicen que funciona.

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